Quiero alquilarte.
—Hay hasta montañas.
—Y valles. Cañones. Y llanuras.
—¿Qué es eso que brilla como un zafiro? ¿Qué es eso?
—Tycho. Un asteroide se estrelló allí y rompió la Luna. [...] Hizo un cráter en la Luna cien veces más grande que el Cañón de Colorado. A la derecha, está el Mar de la Tranquilidad. Allí alunizó la primera nave espacial que envió la Tierra, el día que yo nací.
—[...] La Luna. Ahora la veo diferente. No tan misteriosa ni romántica.
—Siento habértela estropeado.
—No lo has estropeado. Solo la has cambiado.
Amanda Peterson y Patrick Dempsey en No puedes comprar mi amor , 1987